Terminamos otra semana del año 2017, mientras unos se afanan en seguir celebrando el acontecimiento “mundial” que vamos a costear todas las enfermeras españolas a cuerpo de rey para nuestros representantes colegiales, las enfermeras de a pie somos pisoteadas a diario.
Y es que bastan 2 ejemplos para poder observar el nulo reconocimiento profesional que tenemos las enfermeras en España y el desinterés de nuestros representantes profesionales por dignificar la Enfermería.
El primer ejemplo, surge en la Comunidad autónoma de Cantabria, donde en su boletín oficial del pasado día 31 de Enero se publicaba una oferta de empleo público correspondiente al año 2016 en la categoría de Enfermería para el Sistema Cántabro de Salud (SCS) compuesto por la ridícula cantidad de 5 plazas…
¿Alguien entiende que un sistema sanitario autonómico con 4 hospitales generales, y uno de ellos de referencia a nivel nacional como el Marqués de Valdecilla, pueda sobrevivir ofreciendo sólo 5 plazas fijas para enfermeras en un año?
¿Así es como el Presidente Revilla y la consejera de sanidad del PSOE de Cantabria van a dignificar el sistema sanitario público?
¿Es está la mejor forma que un gobierno autonómico tiene para dar cumplimiento a lo establecido en la reciente sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea sobre el uso excesivo de la temporalidad laboral en España?
¿Alguien ha oído alguna declaración tanto del Sindicato de Enfermería (SATSE), como del Consejo General de Enfermería de España o del Colegio Enfermería de Cantabria, rechazando estas nimias ofertas de empleo público para enfermeras?

Por otro lado, en esta semana también ha sido publicado en la Comunidad Autónoma de Madrid el Acuerdo de la mesa sectorial para constituir la bolsa de contratación temporal de enfermeras en el Summa112. Resulta absolutamente desconcertante que tras 1 año de la aprobación de la bolsa “única” de enfermería (que regula la contratación temporal en Atención Primaria, Atención Especializada y Summa112 del SERMAS) con un baremo uniforme para todos los profesionales y a poco más de un mes de la publicación de sus listados definitivos, ahora vuelva descentralizarse el sistema de contratación.
Y es que, si invertimos sólo 2 minutos de nuestro tiempo para leer detenidamente el pacto de la nueva bolsa temporal de enfermeras del SUMMA112 nos damos cuenta de la tomadura de pelo que intentan perpetrar tanto la Consejería de Sanidad como los sindicatos de la mesa sectorial, calcando tanto las bases de la bolsa única como su baremo. Todo un lamentablemente acto de autobombo para nuestra consejería, que no sólo no incrementa las posibilidades laborales de las enfermeras madrileñas, si no que vuelve a generar confusión, gasto en fotocopias y tiempo en burocracia.
¿No se podría haber aprovechado, por lo menos este nuevo pacto, para reconocer todos los niveles académicos de las enfermeras (master y doctorado), como por cierto si ocurre en el mismo, para nuestros compañeros los médicos?
¿Son éstas las mejoras que creen que necesitan los sistemas selectivos temporales del SERMAS, desde la Consejería de sanidad y los sindicatos sectoriales, para dotarlos de objetividad, transparencia y agilidad?
¿Era imperioso desgajar la selección temporal de enfermeras antes que plantearse crear bolsas para otras categorías sanitarias que a día de hoy se siguen contratando por el dedo divino dentro del SERMAS?
¿Y realmente el sindicato SATSE cree que la mayor preocupación laboral de las enfermeras de Madrid es ésta para estampar con urgencia su firma, cuando llevamos más de cinco años con una bolsa única opaca e inoperativa y continuamos con unos índices de temporalidad e inestabilidad escandalosos en el SERMAS?

Querid@s compañer@s enfermer@s, mientras sigamos calladas y sumisas ante esta connivencia de nuestros representantes profesionales con unas Administraciones públicas que nos consideran meras marionetas que manejar, nuestra profesión nunca saldrá del Pleistoceno.

Desde AME, como acostumbramos a hacer, no nos plegamos a los turbios intereses de unos y otros; por ello, exigimos al Consejo General de Enfermería de España, a los colegios provinciales de Enfermería y al Sindicato SATSE, que se hace llamar de Enfermería, que se dejen de celebraciones absurdas y se remanguen para luchar por un verdadero reconocimiento social, profesional y académico, pleno de las enfermeras españolas.

Asociación Madrileña de Enfermería (AME).